La maestra y los niños se desplazan al patio
de la escuela donde previamente la maestra habrá colocado distintos
contenedores y habrá preparado una bolsa con materiales de diferentes texturas
y hará una introducción de la actividad.
A continuación, les explicará los diferentes
tipos de residuos, con ejemplos, que se pueden encontrar en la vida cotidiana y
les enseñará a clasificarlos en los distintos contenedores según los colores
que presentan cada uno en la vida diaria.
AMARILLO: ORGÁNICOS;
restos de carne, pescados, verduras, huevos...
VERDE: LATAS,
BRICKS Y PLÁSTICOS; brick de leche, latas, envases del yogur...
AZUL: PAPEL Y
CARTÓN; periódicos viejos, cajas de zapatos...
Seguidamente, volverán al aula y la maestra
les hará varias preguntas sobre los contenedores y los tipos de residuos que
han visto para comprobar si han entendido la explicación. ¿Qué color
corresponde al papel? ¿En qué contenedor debemos tirar el yogur cuando nos lo
comamos?
A continuación, se les puede entregar una
ficha en la que aparezcan tres contenedores y tres tipos de residuos que
deberán colorear del color que corresponda según sea papel, plástico u
orgánico.
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